
La mayoría de estos animales fueron entregados voluntariamente por sus dueños, solo en el caso de un mono capuchino se inició un proceso penal contra una persona por el delito de maltrato animal.
El tráfico de fauna silvestre en Bolivia amenaza a varias especies en peligro de extinción, en lo que va de este año se rescataron 200 animales silvestres.
Estos animalitos rescatados fueron llevados a los centros de custodia Senda Verde Y Selva María ubicados en el norte paceño.