A nivel mundial, en promedio cada persona utiliza 250 bolsas plásticas al año, pero en Bolivia la cifra se incrementa a 372 y su vida útil es menor a 15 minutos, ocasionando una problemática de contaminación ambiental que cada año se agrava.
El plástico en Bolivia mueve millones de dólares y se ha convertido en un negocio muy rentable que genera un impacto ambiental de grandes proporciones. Esta problemática debe ser analizada para buscar formas de reducir su consumo. Según datos la fundación Suiza para la Cooperación Técnica Swisscontact Bolivia, existen 200 empresas que se dedican al reciclaje de diferentes productos que están contemplados en el proyecto “Mercados para el Reciclaje”
La meta es reducir de manera progresiva el uso de bolsas plásticas mediante la implementación de tecnología e innovación para sustituir las bolsas plásticas. Hidrobag es una empresa cruceña que viene trabajando en la fabricación de bolsas biodegradables que se desintegran en el ambiente en 180 días, sin generar ningún tipo de contaminación.
En ese intento por reducir el uso de bolsas plásticas, el municipio de Sacaba fue el primero en promulgar una ley municipal para sustituir las bolsas de plástico por envases de tela.
Existen iniciativas y políticas que apuntan a reducir el uso de bolsas plásticas, pero deben estar acompañadas de una ley nacional que permita a los municipios y gobernaciones ejercer control y sancionar su incumplimiento.
(RTP)