Desde la época colonial, Bolivia escribió una larga historia de explotación de sus recursos naturales para su exportación a otros países. Este modelo extractivo que todavía sigue vigente, se inició con la plata, luego fue el estaño, posteriormente el agro negocio, el gas y ahora apunta al litio para sostener la economía del país.
Para revertir nuestra dependencia y salir de este círculo vicioso, debemos cambiar nuestra mentalidad, sacarnos ese chip y asumir conciencia de que es posible iniciar un proceso de transición, no solo para mejorar nuestra economía, sino también para preservar nuestros recursos naturales.
La crisis climática plantea la necesidad de salir de esa dependencia y para ello la Fundación Friederech-Ebert-Stiftung en coordinación con la UMSA viene realizando coloquios para analizar y debatir posibles alternativas. En ese sentido se plantean 4 pilares basados en: cadenas agroforestales, turismo sostenible, economía digital y minería responsable que permitan al país salir de este círculo vicioso.
Bolivia ya siente los efectos de la crisis climática y las regiones del área rural son las más afectadas, en ese sentido debemos transitar a un modelo alternativo, sostenible y en armonía con la naturaleza.
POR ÁNGEL LOZANO