
Las intensas lluvias provocaron una crisis en el departamento de La Paz, dejando más de 18.000 familias damnificadas. Según la Gobernación, 30 municipios fueron declarados en desastre debido a la magnitud de los daños.
La provincia Ingavi es la más afectada, con comunidades enteras anegadas y caminos intransitables.
Las autoridades coordinan la ayuda humanitaria y evalúan medidas para mitigar los efectos del temporal. La Gobernación destinó 3.5 millones de bolivianos, de los cuales se ha utilizado el 65% para la respuesta inmediata y la atención a los afectados.
JAVIER BAUTISTA
PERIODISTA DEL SISTEMA RTP