
El Gobierno aprobó un Decreto Supremo que autoriza a la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) subvencionar la producción y comercialización de alimentos básicos con el fin de garantizar la seguridad alimentaria y estabilizar los precios en el mercado interno.
“Con el objetivo de apoyar a los sectores de la cadena productiva de alimentos y contribuir a la estabilización de sus precios en favor de la población boliviana, hoy (miércoles) en Gabinete aprobamos un decreto supremo que autoriza la subvención destinada a la producción y comercialización de productos agropecuarios y sus derivados a precios justos”, informó el presidente Luis Arce en sus redes sociales.
La medida incluye la subvención de harina, manteca, levadura y azúcar para el sector panificador; arroz para asegurar el abastecimiento interno; maíz amarillo duro para los productores avícolas; y trigo. “Con esta medida estamos garantizando la seguridad con soberanía alimentaria del país, promoviendo el bienestar de nuestra población”, destacó el mandatario.
El ministro de Desarrollo Productivo, Néstor Huanca, explicó que la política de subvención contempla un presupuesto de Bs 528 millones para acopiar productos agropecuarios como trigo (150.000 toneladas) y arroz (80.000 toneladas), además de garantizar insumos para la elaboración del “pan de batalla”, como 126.000 quintales de azúcar, 144.000 cajas de manteca y 48.000 cajas de levadura.
“El esfuerzo que hacemos como Gobierno nacional es subvencionar alimentos con el objeto de mantener precios justos y no afectar la economía de las familias más necesitadas”, enfatizó Huanca. Asimismo, señaló que Emapa continuará comercializando arroz y maíz a precios subvencionados para productores primarios y pecuarios, asegurando la producción de alimentos como carne, huevo y leche
Subvención para el pan
Por su parte, el viceministro de Comercio y Logística Interna, Grover Lacoa, informó que el Gobierno y la Confederación de Panificadores de Bolivia suscribieron un acuerdo para abastecer al sector panificador con insumos subvencionados. “Logramos un acuerdo importante que garantiza el precio del ‘pan de batalla’ sin ningún tipo de variación durante esta gestión. El precio no subirá y se mantendrá en Bs 0,50 la unidad”, señaló.
El acuerdo incluye la dotación mensual de 10.000 quintales de azúcar, 12.000 cajas de manteca y 4.000 cajas de levadura, además de 2,5 millones de bolsas de harina de 50 kilos durante el año. Tras estas medidas, el sector panificador levantó el paro de 72 horas iniciado el martes, asegurando el abastecimiento del “pan de batalla” para las familias bolivianas.”
(BRÚJULA DIGITAL)