Crimen en Pucamayo: aprehendido confiesa que una víctima fue enterrada viva y las otras cuatro fueron quemadas
Las cinco personas que fueron secuestradas en Pucamayo, municipio de Villa Tunari, en Cochabamba, tuvieron una muerte atroz de acuerdo con la declaración del único aprehendido del caso. Una de las víctimas fue enterrada viva, mientras que las otras cuatro fueron quemadas. Ernesto A. Ch., de 33 años de edad, quien en las últimas horas fue enviado al penal de San Sebastián por seis meses con detención preventiva, declaró la manera en que fueron ejecutadas las cinco personas. El pasado 12 de noviembre se reportó que cinco personas fueron retenidas por pobladores de Pucamayo. Según el autor del crimen, Cristian Serna, un militar dado de baja, logró escapar, pero fue encontrado en “unos plátanos” de ahí fue llevado más adentro. “Con relación a Cristian, él se ha escapado más adentro, le hemos encontrado en unos plátanos, de ahí lo hemos llevado más adentro, hemos cavado y le hemos metido sano de rodillas, después lo hemos tapado con tierra”, indicó el aprehendido, citado por Red Uno. De acuerdo con Jhonny Aguilera, viceministro de Régimen Interior y Policía, Serna fue obligado a cavar su propia tumba. En cuanto a las otras cuatro personas, el hombre relató, en su declaración ante la Fiscalía, que fueron quemadas luego de haber sido maniatadas. “A todos les hemos amarrado manos atrás y las señoras manos adelante, sus caras les hemos tapado con trapo, después han decidido quemar a la gente, decían a qué vienen policías militares”, agregó. Según su relato, los comunarios estaban molestos al descubrir que se trataba de uniformados, los tres hombres eran militares en diferente situación, y los relacionaron con los operativos de desbloqueo en Parotani. “La gente ha controlado sus carnets, del caballero (Juan Román) decía militar en su carnet, las otras dos señoras (Liza Loroña y Trinidad Muñoz) decía militar y policía, de ahí la gente se ha enojado, decían que seguro han participado en Parotani”. El hombre indicó que las dos mujeres suplicaron por sus vidas, señalando que tenían hijos, pero no fueron escuchadas por la turba. Los cuerpos de las víctimas llegaron esta madrugada al Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF) donde se realizó la autopsia correspondiente, remarcando que el fallecimiento fue por impacto de un disparo en la cabeza, al margen de esto presentaban varias lesiones en el cuerpo. (VISIÓN 360)