Una investigación publicada el 11 de julio de 2023 por World Animal Protection, publicada en la revista Oryx de la Universidad de Cambridge, reveló que varios objetos como billeteras, sombreros y cinturones se elaboran con piel de jaguar y otras especies silvestres amenazadas y cuyo comercio está prohibido. Los objetos que se exhiben en mercados y ferias salen de la prisión de Mocovi, en Trinidad.
“Nos llegaron alertas desde Bolivia sobre el tráfico ilegal de partes de jaguar y luego recibimos un video en el que se cuenta cómo las pieles están entrando a la cárcel de Mocoví para poder confeccionar diferentes artículos como billeteras, sombreros, cinturones. Inmediatamente empezamos a hacer el rastreo para confirmar la información y tener pruebas”, señala Roberto Vieto, uno de los autores de la investigación y gerente de campañas de Vida Silvestre de la organización World Animal Protection.
Según el estudio, los reclusos adquieren las pieles de animales silvestres de dos fuentes diferentes. En primer lugar, compran pieles de jaguar y boa (Boa constrictor) directamente a los cazadores, quienes venden a bajo precio las piezas de poca demanda o dañadas a los internos. “También hicimos entrevistas en el Mercado Campesino, ubicado en Trinidad, dónde nos confirmaron que ellos envían las pieles a la cárcel para que se puedan confeccionar los artículos”, explica Vieto.
Precisa que los prisioneros confeccionan estos objetos para obtener un sustento para ellos o sus familias. El experto señala que es una cadena complicada de comercio ilícito, porque son personas que están recluidas por haber cometido alguna actividad ilícita y se les hace participe en otro crimen, como es la comercialización de partes de jaguar, actividad prohibida en Bolivia. “Estamos hablando de tráfico, de comercio ilegal de partes de animales silvestres”.
El jaguar es una especie considerada Casi Amenazada, según la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN). Sin embargo, en Bolivia, el Libro Rojo de la Fauna Silvestre de Vertebrados del país, lo categoriza como Vulnerable (VU).
En Bolivia está prohibida la caza del jaguar y el comercio de sus partes, así como de otras especies silvestres. Bolivia, incluso, ha sido uno de los países que respalda la decisión de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES, por sus siglas en inglés) que considera “el comercio ilegal de partes del jaguar como tema prioritario regional en los esfuerzos para conservar al felino más grande de América”.
Mery Castillo, asesora del Viceministerio de Medio Ambiente, Biodiversidad, Cambios Climáticos y de Gestión y Desarrollo Forestal, dijo que se ha iniciado una investigación en la cárcel de Mocovi, en Trinidad. “Recibimos la denuncia y fuimos a verificar a la cárcel de Trinidad. Nos reunimos con el director del recinto penitenciario para manifestarle que teníamos denuncias de que estaba ingresando cuero de jaguar para para hacer blleteras, carteras y otros objetos, pero ellos mencionaron que en realidad se trata de cuero de lagarto”.