
El huracán Melissa impactó la isla el martes 28 de octubre como una tormenta de categoría 5, dejando un panorama de destrucción generalizada, cortes de electricidad masivos y daños severos en viviendas, hospitales e infraestructuras.
El fenómeno tocó tierra con vientos sostenidos de 295 km/h (185 mph), atravesando la isla de sur a norte y provocando las peores condiciones meteorológicas en 174 años. El primer ministro Andrew Holness declaró a Jamaica como “zona catastrófica”, activando de inmediato los protocolos de emergencia. Más de 15,000 personas se encuentran alojadas en refugios temporales.
Impacto y Situación de Emergencia
Las inundaciones severas y una marejada ciclónica de hasta cuatro metros han dejado vastas regiones, como St. Elizabeth, completamente anegadas. Testimonios y reportes preliminares describen casas sumergidas, carreteras intransitables, tejados arrancados y postes eléctricos caídos.
Se estima que 1.5 millones de personas han sido afectadas directamente. Aunque aún no hay cifras oficiales de víctimas, las autoridades temen que aumenten conforme avancen las labores de rescate.
Holness aseguró que el país enfrenta una crisis sin precedentes y pidió el apoyo inmediato de la comunidad internacional para acelerar las tareas de auxilio y reconstrucción.
Coordinación de la Ayuda Humanitaria
Organismos internacionales, como la ONU, han comenzado a coordinar el envío de asistencia humanitaria y suministros de emergencia. Equipos de rescate locales e internacionales trabajan para restablecer servicios básicos y evaluar los daños estructurales en hospitales y escuelas.
Los cortes eléctricos afectan casi toda la isla, y los servicios de telecomunicaciones permanecen interrumpidos en amplias zonas.
Satélites y drones captaron el imponente ojo del huracán mientras cruzaba la isla, evidenciando su rápida intensificación. La Fuerza Aérea de Estados Unidos también realizó vuelos de reconocimiento para estudiar su comportamiento atmosférico.
El huracán Melissa ha sido descrito por los meteorólogos como “la tormenta del siglo” en Jamaica, un evento que desafía la capacidad de recuperación del país y marca un antes y un después en su historia climática.
AGENCIAS