Poner en operación el pozo Mayaya Centro-X1, ubicado en el municipio de Alto Beni, provincia Caranavi en La Paz, que tiene un potencial de 1,7 Trillones de Pies Cúbicos (TCF por su sigla en inglés) demandará una inversión entre $us 1.300 millones a $us 1.500 millones.
El ministro de Hidrocarburos y Energías, Franklin Molina, informó que para el desarrollo de ese pozo se debe realizar la perforación de otros pozos delimitadores, la construcción de un ducto y el emplazamiento de una planta de procesamiento del gas que se extraiga del Mayaya Centro-X1.
“Una vez que se ha descubierto el pozo se tienen que hacer las inversiones necesarias. Todo lo que significa esas inversiones podrían superar los 1.300 (millones) a 1.500 millones de dólares de inversión”, dijo la autoridad a la red Unitel.
En contrapartida, afirmó que la explotación de ese pozo hidrocarburífero generará una renta petrolera aproximada de $us 6.000 millones.
En la sesión de honor por los 215 años de la gesta libertaria de La Paz celebrado en la Casa Grande del Pueblo, el presidente Luis Arce reveló el hallazgo de 1,7 TCF de recursos hidrocarburíferos en el megacampo Mayaya que convierte al departamento paceño en el quinto productor del país.
Anunció que se desarrollarán, inicialmente, tres pozos delimitadores y la construcción del ducto de interconexión para la producción de hasta 10 millones de metros cúbicos (MMm3) de gas natural y de 500 a 1.000 barriles de petróleo por día. Lo que se traducirá en ingresos de aproximadamente de $us 6.800 millones “en la vida total de este proyecto”.
Molina sostuvo que el desarrollo de esos trabajos para el inicio de operaciones del Mayaya Centro-X1 tiene que ser aprobado por el directorio de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
El presidente de la petrolera estatal, Armin Dorgathen, dijo el lunes que el desarrollo del Mayaya Centro-X1 demorará entre dos y tres años para luego obtener las primeras moléculas de gas.
Para “la producción de gas, la puesta en marcha tomará unos dos a tres años hasta que podamos tener la conectividad al sistema de ductos, son tiempos más altos para la puesta en producción”, complementó.
(La Razón)