
No cabe duda que el calentamiento global está alterando los patrones climáticos en el mundo y Bolivia siente los efectos: más de 450 mil familias se ven afectadas por las lluvias e inundaciones, que continuarán registrándose hasta mediados de abril, según el pronóstico del SENAMHI.
Uno de los sectores más afectados por los desastres naturales es el agropecuario. La pérdida de sembradíos, cultivos y ganado ocasionarán pérdidas millonarias, que sin lugar a dudas disminuirán la producción de alimentos y la seguridad alimentaria.
Las comunidades indígenas están aún más afectadas, porque no solo perdieron sus casas o sus cultivos, sino que perdieron el bosque y su forma de vida.
Nos encontramos en plena carrera electoral y lamentablemente la mayor parte de los candidatos a la presidencia proponen salir de la crisis económica en base al extractivismo y nadie plantea soluciones económicas sostenibles preservando el medio ambiente.
ÁNGEL LOZANO
PERIODISTA DEL SISTEMA RTP