Cancillería convoca a la Encargada de Negocios de Estados Unidos por presunta intromisión
FOTO: Embajada de Estados Unidos La Cancillería convocó a la encargada de negocios de la Embajada de Estados Unidos en Bolivia, Debra Hevia, por presuntas acciones de intromisión en asuntos internos cometidas por la representante diplomática y personal de la legación estadounidense en Bolivia. La convocatoria se produjo 10 días después de un desmentido que publicara esa delegación diplomática a unas acusaciones lanzadas por el ministro de Economía, Marcelo Montenegro, y luego de que el Gobierno, a través del presidente de YPFB, Armin Dorgathen, negara la llegada de crudo ruso al país, elemento restringido por el gobierno de Estados Unidos con la advertencia de duras sanciones. “Este lunes se convocó a la Encargada de Negocios de Estados Unidos, Debra Hevia, con el propósito de hacerle conocer la preocupación y establecer un reclamo sobre una serie de pronunciamientos y acciones que se realizaron por parte del personal de la Embajada de Estados Unidos, que se consideran como una intromisión en asuntos internos”, señala una parte del texto publicado por la Cancillería. El miércoles 13 de junio, hace 10 días, el ministro de Economía acusó directamente a la embajada estadounidense de urdir un “golpe blando” en contra del gobierno de Luis Arce. Aunque dijo que había otras embajadas involucradas apuntó, a la legación de EEUU como la principal autora. Un día después esa misión diplomática emitió un comunicado mediante el cual desmintió las acusaciones lanzadas por Montenegro. “El Estado Plurinacional de Bolivia promueve una política exterior basada en los principios de igualdad, no injerencia y respeto a la soberanía, en el marco de las normas del derecho Internacional que regulan las relaciones diplomáticas. En esta línea, rechaza cualquier tipo de acción que promueva la injerencia en nuestro país”, señala otra parte del comunicado de la Cancillería boliviana. El jueves de la semana pasada, se informó desde Rusia que la petrolear Lukoil envió 336.000 barriles de diésel para Bolivia a través del puerto chileno de Arica. Esa línea, el ministro de Obras Públicas, Édgar Montaño, repitió la línea discursiva desde Potosí, adonde llegó para visitar de manera sorpresiva surtidores en esa capital. Este domingo, Dorgathen negó un acuerdo con Rusia para que ayude con el suministro de carburantes povrenientes de Rusia y aseguró que no existe ni un solo buque con ese propósito en el puerto de Arica. (DATÁPOLIS)
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