Chiquitanía

Hace unas semanas encontramos a estos niños junto a su madre en la zona de Sopocachi, pidiendo ayuda para reunir dinero necesario para comprar medicamentos para su padre, quien está enfermo en su comunidad. Desde entonces, llevamos a cabo una campaña para ayudar a ésta humilde familia que llegó de Santa Cruz desde hace un par de semanas. Durante ese tiempo, la gente de buen corazón respondió con donaciones de ropa, alimentos y dinero. Además, gracias a gestiones realizadas por el Ministerio de la Presidencia, recibieron electrodomésticos y juguetes. La sonrisa de estos niños hizo que por unos minutos olvidemos los difíciles momentos que están atravesando, al igual que otras familias de origen humilde. Con gran satisfacción, cerramos con éxito la campaña en apoyo a la comadre Lenny y sus hijos, quienes llegaron de la Chiquitanía hace unas semanas. Agradecemos profundamente a todas las personas de buen corazón que colaboraron de manera inmediata y generosa. (RTP)

Todos los días los encontramos en la avenida 6 de agosto de La Paz, pidiendo ayuda para poder comer mientras están en la urbe paceña. Lo que no sabían es que los funcionarios de la AJAM les tenían preparada una sorpresa: recolectaron ropa abrigada para ellos. Pusimos a su disposición la movilidad de prensa para trasladarlos hasta ese lugar. Esta familia llegó desde la Chiquitanía buscando ayuda, ya que el padre de estos niños está enfermo y no puede trabajar debido a su delicada condición de salud. Entre ellos utilizan su lengua materna, el ayoreo, para comunicarse, que forma parte de la familia zamuca y se habla tanto en Bolivia como en Paraguay. Los niños aseguran que aprenderla no es difícil. Agradecemos a las personas de buen corazón que no dudaron ni un segundo en donar dinero o ropa para esta familia, quienes están alojados en un pequeño cuarto que alquilaron en la ciudad de El Alto. (RTP)

La madre de esta familia, sin dudarlo, se trasladó con sus tres hijos desde la Chiquitanía hasta La Paz en busca de ayuda para comprar medicamentos para su esposo, quien lleva tiempo postrado en cama debido a una enfermedad. Están alojados en un pequeño cuarto en El Alto. Durante el día, piden la caridad de la gente para reunir algo de dinero que garantice la compra de los medicamentos; sin embargo, lo recolectado apenas alcanza para la comida. Los niños, quizás sin comprender el difícil momento que atraviesan sus padres, sueñan inocentemente con recibir juguetes antes de regresar a su región. Esta familia necesita con urgencia zapatos, ropa abrigada, pañales y leche para los niños. Se hace un llamado a todas las personas de buen corazón para colaborar con ellos, dejando sus aportes en el brazo social de RTP o comunicándose directamente al celular 63581470. Tu apoyo puede hacer una gran diferencia en la vida de esta familia. (RTP)