A medida que aumentan los impactos del cambio climático y crece la población en el mundo, existe la necesidad apremiante de unir esfuerzos para proteger y conservar nuestro recurso más preciado: el agua.
La vida en el planeta depende del agua y, pese a su importancia, muchos lagos, ríos y humedales están sufriendo daños irreversibles debido a las actividades del hombre. La minería, la deforestación, la contaminación y el uso irresponsable son las principales amenazas para el recurso hídrico.
La salud pública y la prosperidad, los sistemas alimentarios y energéticos, la productividad económica y la integridad ambiental dependen del buen funcionamiento y la gestión equitativa del ciclo del agua. En ese sentido, es urgente implementar una gestión integral del recurso hídrico como una política de estado en coordinación con todos los niveles de Gobierno.
RTP